jueves, mayo 10, 2007

Desmotivación

Había evitado tocar este tema puntual. Se me vuelve complicado ya que nunca ha sido mi intención traspasar mis preocupaciones a los pocos, pero muy honorables, lectores de siempre. Sin embargo se me vuelve necesario un desahogo, y eventualmente un consejo.

Hace ya un tiempo que vengo con el mismo sentimiento encontrado respecto a mis estudios. Como bien sabrán algunos estoy tratando de continuar mi carrera, y sacar un título de ingeniero de ejecución en computación, siendo que paradojalmente trabajo como tal en una empresa del rubro.

Muy en resumen, no se si seguir estudiando.
La base de todo: MOTIVACIÓN

Por más que busco no hay mucho nada que me motive a seguir estudiando.
  • Por un lado veo que el mercado laboral, puntualmente en el rubro de la informática, si bien es cierto se encuentra saturado de malas ofertas (y por ende profesionales mediocres ad-hok a ellas), también está exigiendo profesinales cada vez más especializados, e idealmente actualizados en cuanto al manejo de las nuevas y no tan nuevas tecnologías.
  • Por otro lado mi ritmo de aprendisaje de nuevas materias va en función de los requerimientos reales que se me presentan, puedo discriminar que aprender, canalizo de mejor manera mis esfuerzos.
El gran problema es que ninguna institución académica en Chile satisface mi necesidad de conocimientos de buena manera. Lo que es peor, las materias tratadas por los ramos de la malla curricular, escasamente me resultan ajenos o desconocidos. La experiencia y la necesidad me han entregado cierto grado de experticia en buena parte de los temas que aborda cada curso.

Y sumado a eso está el ineludible factor económico. Siendo muy realistas, dificilmente me van a pagar más por tener el quemable cartón título. Y salvo muy contadas y ridículas excepciones, rara vez habrá una empresa que me exija el título profesional.
Otro argumento a sumar, resulta la inversión no menor que me significa seguir estudiando, por un lado la mensualidad, y por otro el tiempo invertido. Saliendo a las 10:30 PM y llegando después de las 11 PM a la casa dificilmente me quedan fuerzas, y para que decir de ánimo, para ponerme a hacer otras cosas, entre gustos y necesidad, como lo es dedicar unos minutos a la música, o a cocinar, planchar y hacer aseo (agrego a eso el factor de pasar buena parte de los fines de semana fuera de Santiago, por lo que tampoco puedo disponer libremente de ese tiempo para la entretención local y los quehaceres del hogar).

En ese sentido más provechoso me resultaría invertir esa misma suma y sacar una certificación Java, el lenguaje en si me motiva, me gusta, y créanme que para el curriculum una certificación pesa tanto, y a veces incluso más, que el título.

Al final estoy poniendo en juego mucho más que una visión a futuro, estudiar ya no me hace feliz, me subi a una máquina que no puedo detener. Hace mucho tiempo que el tema del cartón dejó de significar alegría o frustración para mí. En realidad significa más para el resto que para mi, y yo sin cartón tengo clarísimo cuanto peso, cuanto valgo, cuanto puedo dar.

Reitero a modo de aclaración que mis observaciones y argumentos aplican solamente a mi carrera y especialización. Es altamente probable que la exigencia, peso y valor de un título profesional sea muy distinta para otras áreas. Sin contar aquellas donde para poder ejerrcer como tal se debe tener SI O SI el título, como la medicina y sus ramas, el derecho, y la construcción civil, entre otras.

Definitivamente, NO QUIERO SEGUIR ESTUDIANDO, pero hay una buena cuota de prejuicios ajenos contra el tema, que inevitablemente me hacen pensarla 2 veces cuando pienso en dejar la universidad.

2 comentarios:

Horacio dijo...

La verdad es que hay partes en donde ya ni siquiera te preguntan si estudiaste algo. Al ritmo en el que se desarrollan las tecnologías cada vez va a ser más difícil lanzar carreras (largas, completas) que dejen satisfechos a quienes desean introducirse en alguna especialidad. Si no hay carreras interesantes, ¿Quién se va a motivar a estudiar? Sobre todo si consideramos que algunos rubros ya ni siquiera piden esa formazalición. (Para que hablar de los medios de comunicaicón)

Por otra parte, esa denominada presión social molesta bastante a la hora de tomar una decisión. Yo lo viví con mi familia también en un principio y es una piedra en el zapato. A pesar que me salí con la mia.

En fin, mi comentario no va más allá de una mera impresión personal, debido a que desconozco seriamente ese tipo de detalles del rubro en el que te desempeñas (asi como los detalles de muchos otros rubros). Sin embargo, no puedo dejar de estar de acuerdo contigo y apoyarte, ya que eres una persona que lleva años de circo desarrollándose n la materia, y si crees estar seguro de lo que piensas tras todo este tiempo, es porque definitivamente algo de razón tienes que tener dentro de tu escenario. Si tú mismo has visto con tus propios ojos cuál es la relación que hay con un diploma en tu trabajo. Y claro, como tú lo mencionas. Al final has aprendido más trabajando que estudiando.

Sin lugar a dudas que la certificación es una muy buena alternativa. Sobre todo si es algo que te gusta.

Éxito

Anita dijo...

Estimado Santa, comprendo tu descontento y desmotivación por el estudio, el sistema y todo lo demás.

Tal vez sería bueno, con todo respeto, que te detuvieras un momento a ver qué es lo que tú quieres para tu vida.

Una vez con la mente clara y fría, ve si te subes a la micro (no al transantiago por favor) o te bajas de ella, cachay.

Otra cosa muy, pero muy importante.
Gracias por tu cariño y preocupación en los días que he estado enferma.
Aquí, como te darás cuenta, estoy poco a poco poniéndome al día con mis amig@s.

Un fuerte abrazo.

Anita.
Me siento, gracias a Dios, mejor.